BRAC La isla de los chilenos en Croacia - 19 de Julio de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 578460346

BRAC La isla de los chilenos en Croacia

Nevenka Solovera es chilena, de madre croata, y vive parte del año en Brac, Croacia, donde tiene un hotel boutique en el centro del pueblo al que, año a año, llega una cantidad considerable de chilenos. Y todos, o casi todos, vienen aquí, al cementerio de Supetar.

El cementerio es muy pequeño -se recorre de un extremo a otro en un par de minutos- y desde aquí se puede ver el profundo color turquesa del Adriático justo al frente. Sin embargo, lo que más llama la atención no es el mar, sino que un gran mausoleo blanco, tan grande que se ve incluso cuando uno viene llegando en barco a Brac.

Nevenka se acerca al mausoleo compuesto por una enorme capilla blanca con tres cúpulas y tres cruces, y se detiene frente a un relieve donde se ven las imágenes de un cóndor y un huemul, y una inscripción que dice: "Por la razón o la fuerza", la misma leyenda del escudo chileno.

-En Croacia es sabido que los de Brac se fueron a Chile. Yo siempre lo supe -dice Nevenka quien, si bien nació en Chile, a los 10 años y tras la muerte de su padre se vino a Croacia con su madre y dos hermanos. Con el tiempo se radicó definitivamente en Split y abrió, en Brac, Villa Adriática, el hotel que maneja junto a su marido croata.

El mausoleo con el escudo chileno pertenece al empresario croata Francisco Petrinovic, quien salió de Brac en 1900 e hizo gran fortuna en Antofagasta y Santiago, primero en la industria del salitre y luego en la navegación. Su mausoleo es uno de los mayores hitos de esta verde y montañosa isla de 14 mil habitantes situada a una hora en ferry desde Split, la ciudad más cercana, y que, pese a su lejanía geográfica, tiene un estrecho vínculo histórico con Chile. En el cementerio de Supetar, bajo las lápidas de piedra salpicadas por la brisa del Adriático, yacen los restos de varios Boric, Dragicevic, Vodanovic, Fadic, Papic, Tomicic o Vuskovic, entre otros apellidos que podrían sonar familiares para cualquier chileno. Estos son los que se quedaron, los que nunca dejaron Brac, los que no se convirtieron en algunos de los empresarios, políticos, dirigentes o artistas más reconocidos e influyentes de Chile.

Según datos de la Corporación Cultural Chileno-Croata, se estima que en Chile hay alrededor de 400 mil descendientes de croatas, que comenzaron a llegar hacia fines del siglo XIX y se radicaron fundamentalmente en Punta Arenas y Antofagasta. De ellos, cerca del 90 por ciento llegó específicamente desde la isla de Brac, una más de las mil que pertenecen a este país.

De acuerdo al historiador chileno Mateo Martinic, descendiente de croatas, los primeros inmigrantes de este país llegaron, específicamente a la Región de Magallanes, entre 1890 y 1893, cuando se descubrieron depósitos de oro en las islas al sur del canal Beagle. En ese momento, Croacia formaba parte del Imperio Austro-Húngaro y, como explica Martinic en su libro La Inmigración Croata en Magallanes, lo que más los atrajo fueron las posibilidades de progreso individual y colectivo, que en su país estaban limitadas por la rigidez social de la época. "Una vez en Chile -escribe Martinic- los inmigrantes pronto comprendieron que esta era una nación libre de odiosos privilegios, cuyo democrático y saludable vivir en el respeto de los derechos del hombre garantizaba a cualquiera una posibilidad cierta...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR