Bitácora del espionaje al cuartel general de la Sofofa
Esta trama comenzó a tejerse hace poco más de una semana, cuando el director de Carozzi y vicepresidente de los industriales, José Juan Llugany, recibió la confirmación de la empresa de espionaje Profacis -agencia que asesora a Carozzi-, de que su oficina había sido intervenida con un micrófono.
La posibilidad de que se tratara de un caso de espionaje industrial se descartó rápidamente desde la propia empresa (ver entrevista). Llugany llamó al presidente del gremio, Hermann von Mühlenbrock, y acordaron contratar los mismos servicios de Profacis para cerciorarse de que su oficina en Andrés Bello 2777 no estuviese también intervenida. Hasta ese momento, el trabajo de detección solo era de conocimiento de un círculo muy cerrado, en que figuraban Von Mühlenbrock, Llugany, Gastón Lewin, entre otros.
La inspección de Profacis detectó un micrófono instalado en la Sofofa, estratégicamente en el techo, justo donde colindan las oficinas de Von Mühlenbrock y del secretario general de los industriales, Jorge Ortúzar. Desde ese sitio, el dispositivo permitía capturar las conversaciones de ambas oficinas, a través de un dispositivo similar al descubierto días antes en la oficina de Llugany.
Profacis entrega dos informes
Tras el hallazgo, los directivos industriales le pidieron un informe a Profacis, empresa que elaboró dos documentos, uno para la firma de alimentos y otro para la entidad gremial.
Los aparatos electrónicos funcionaban a batería y, de acuerdo a la información recopilada, estas fueron cambiadas, por lo que se supone que llevaban un tiempo prolongado en esos lugares. Además, los dispositivos permitían escuchar las conversaciones a través de un teléfono celular de prepago.
Hasta ahí, no se le informó a ninguna autoridad ni a otros consejeros, a la espera de los informes, que llegaron este miércoles en la noche. Y al día siguiente, el timonel de los industriales citó de urgencia a miembros del comité ejecutivo de la Sofofa para contarles lo que ocurría. Estuvieron presentes el propio Llugany, Gastón Lewin, Jorge Ortúzar, Rodrigo Álvarez, José Antonio Valdés, Alejandro Kusanovic, Juan Andrés Errázuriz y Matías Domeyko.
Con posterioridad a esa reunión, Von Mühlenbrock les informó de la situación a Larraín Matte y al consejero Patricio Jottar. El resto de los consejeros recibió el viernes a mediodía un e-mail en que se les informaba sobre lo que ocurría.
El caso llega al Ministerio Público y proliferan las hipótesis
Casi al borde de las 14:00...
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