Bendicen en el Vaticano la imagen de la Virgen del Carmen
En una bochornosa mañana romana, que amenazaba lluvia, se realizó ayer la sencilla, pero emotiva, ceremonia de inauguración y bendición de un mosaico dedicado a la Virgen del Carmen, que se ubicó en la plazoleta Bastione di Mastro de los jardines Vaticanos. La obra, realizada por la artista chilena Francisca Claro Swinburn, es un regalo al Vaticano de la Embajada de Chile ante la Santa Sede.El lugar designado para el mosaico tiene una significación especial, como lo recordó, en conversación con este diario, el cardenal Celestino Aós, arzobispo de Santiago, quien bendijo la obra: "Cada pueblo ha elegido a lo largo de la historia distintas evocaciones con que admirar y venerar a la Virgen, y aquí en el Vaticano en estos jardines que usted ve está esta plaza hermosa donde hay otras imágenes, otras evocaciones marianas de Latinoamérica".De hecho, en este lugar hay imágenes dedicadas a la Virgen del Rosario, de Guatemala; a Santa María de Supaya, de Honduras; a la Virgen del Quinche, de Ecuador; a Nuestra Señora de la Altagracia, de República Dominicana, por citar solo algunas. Sin embargo, el mosaico chileno "tiene una particularidad", expresó el cardenal Giuseppe Bertello, gobernador del Estado de la Ciudad del Vaticano, quien presidió la ceremonia."No es solo la manifestación de la devoción de los chilenos a la Virgen María, ni de las cordiales relaciones entre Chile y la Santa Sede, sino que está creado con el aporte personal de muchos feligreses, que han donado algo para realizarlo, desde una pepita a una piedrita", concluyó la alta autoridad vaticana, expresando sus felicitaciones por esta iniciativa.Tras la bendición del mosaico, el obispo auxiliar de Santiago, monseñor Alberto Lorenzelli, rezó una plegaria especial para los ritos de bendición de las imágenes marianas, pidiendo al Señor por los fieles "que han elaborado esta efigie de la santísima Virgen, para que gocen siempre de su protección y graben en su corazón la imagen que contemplan con sus ojos".Las primeras palabras de Francisca Claro al presentar su obra fueron casi de una conversación íntima con la inspiradora del mosaico: la Virgen del Carmen. "Para mí ha sido un honor haber podido representarte en este mosaico", expresó Claro recordando que, si bien el artista "pone su capacidad, su perseverancia, su disposición, Tú le transmites Tu visión".Agradeció a la Virgen por no haberla dejado "nunca sola y por guiar siempre mi trabajo y el de tantos colaboradores desinteresados y...
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