El 'bazar filosófico' de Walter Benjamin - 19 de Septiembre de 2021 - El Mercurio - Noticias - VLEX 875990569

El 'bazar filosófico' de Walter Benjamin

Un niño en un carrusel, el amor, un reloj, la política alemana, libros y prostitutas, armas, carteles de publicidad, México, sueños, un restaurante, una parada de buses, estampillas, un niño, vitrinas... Eso es y eso hay en "Dirección única", un libro hecho de fragmentos y piezas aleatorias, quizás fortuitas, tal vez intencionadas, que hoy suena común, pero que en 1928, cuando lo publicó el filósofo y crítico alemán Walter Benjamin (1892-1940), era singular.La obra simula la calle de una ciudad, es un artefacto que quiere reflejar el mundo moderno, pensarlo a partir de sus destellos, de su cotidianidad, de sus estímulos que llaman y distraen nuestra atención, y descubrir allí el reverso eterno de lo contemporáneo. Hay textos con títulos como "Oficina de objetos perdidos" o "!Cerrado por reformas¡", en los que Benjamin cuenta un sueño suicida o habla de la primera vez en que uno ve un pueblo o una ciudad.En Atrani, una localidad italiana, observa: "En la plaza del mercado hay una fuente. Hacia la última hora de la tarde, algunas mujeres. Y luego, soledad: el chapoteo arcaico".La obra vuelve a librerías chilenas en una versión ampliada, publicada por Ediciones UDP, con prólogo de Ignacio Echevarría, y a cargo del traductor español Juan de Sola. El material nuevo son textos que Benjamin quiso agregar al libro, y cartas en las que le habla del mismo a amigos como Gershom Scholem.De la academia a la prensaEl filósofo Ernst Bloch, coetáneo y cercano a Benjamin, describió los fragmentos que componen "Dirección única" como una especie de "bazar filosófico", no la arquitectura unitaria y monumental de un tratado de filosofía.Juan de Sola, que recuerda las palabras de Bloch en la "Nota del traductor", recomienda leer el libro en este momento, el próximo año, en febrero de 2027 o cuando sea: "El texto sobre la decadencia alemana es el perfecto retrato de lo que ocurre en las sociedades liberales occidentales de nuestros días. Los dedicados a la prensa, a la crítica y a la publicidad, que se han fundido hasta ser casi la misma cosa, no han perdido un ápice de vigencia".Cuando publicó el libro, a Benjamin se le acababan de cerrar las puertas de la carrera y la escritura académicas. A la vez, en esos años, la publicidad y el cine reemplazaban a los libros, y bullía en Alemania la prensa, y dentro de ella los suplementos culturales. De hecho, varios textos de "Dirección única" los había publicado en diarios y revistas.La docente, traductora y escritora...

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