Un bastión de la cultura y las artes en medio de los campos de La Araucanía
Las congas y bombos resuenan mientras el cencerro en manos del profesor inicia un compás frenético que se oye en medio de una pequeña sala de ensayo. El ritmo de hoy es un mapalé, cuya letra entonan tres jovencitas que son acompañadas por una decena de jóvenes provistos además de trompeta, saxofón, flauta traversa, güiro, batería, bajo y guitarra.
La escena la protagonizan una veintena de estudiantes de la Escuela Claudio Arrau, de Villarrica, establecimiento particular subvencionado que se ubica en el camino a Lican Ray, kilómetro 4, en donde se aplica un novedoso proyecto educacional en el cual el arte es utilizado como método de aprendizaje.
Para educar alumnos integrales
Fundada en el año 2000, esta escuela hoy cuenta con una matrícula de 396 estudiantes en cursos que van desde prekínder hasta cuarto medio, provenientes mayormente de Villarrica y de lugares apartados, como Lican Ray, Huiscapi y Pucón, entre otros. Todos ellos son parte del proyecto educacional denominado "La educación se mueve con el arte", que promueve horas lectivas dedicadas a la danza, la pintura, el teatro y la música, desde los cursos de prebásica hasta cuarto medio.
Esta escuela fue elegida para integrar la Red de Escuelas Líderes de Educación en Pobreza, iniciativa impulsada por la Fundación Chile, Fundación Educacional Arauco, Minera Escondida y "El Mercurio". El objetivo de esta red es uno: destacar la labor de colegios y escuelas que entregan una educación de calidad en contextos de vulnerabilidad.
Para dar forma a este proyecto educativo, los sostenedores Bartolo y Milton Parra replicaron el modelo que se utilizaba en otro colegio cercano -el CAHE Pedregoso- contratando para ello a un grupo de 15 docentes que hacían clases en ese establecimiento. La idea, explica hoy la directora, Angélica Paredes, era ofrecer opciones artísticas en una comuna en donde la mayoría de los colegios privilegiaban el deporte. "Esto nació para crear estudiantes más integrales, que sean más críticos, más cercanos. Villarrica como ciudad tenía muy botado el arte, porque todos los colegios daban fútbol, básquetbol, pero no había nada artístico que enriqueciera a los estudiantes", dice.
Ya con la estructura docente armada -hoy la forman 24 profesores-, en 2010 el nuevo proyecto educativo se puso en marcha en un colegio en donde el 89% de sus estudiantes es vulnerable.
Además de los ramos tradicionales, aquí desde prekínder hasta cuarto básico, los niños cursan danza y teatro, para lo...
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