Autoriza erigir un monumento en la ciudad de Copiapó en memoria de Monseñor Fernando Ariztía Ruiz, Obispo Emérito de Copiapó
| Fecha | 17 Junio 2004 |
| Número de Iniciativa | 3564-04 |
| Fecha de registro | 17 Junio 2004 |
| Etapa | Tramitación terminada Ley Nº 20.081 (Diario Oficial del 25/11/2005) |
| Autor de la iniciativa | Leal Labrín, Antonio, Mulet Martínez, Jaime, Robles Pantoja, Alberto, Vilches Guzmán, Carlos |
| Materia | MONUMENTOS |
| Tipo de proyecto | Proyecto de ley |
| Cámara Legislativa de Origen | Cámara de Diputados,Moción |
AUTORIZA ERIGIR UN MONUMENTO EN LA CIUDAD DE COPIAPÓ EN MEMORIA DE MONSEÑOR FERNANDO ARIZTÍA RUIZ, OBISPO EMÉRITO DE COPIAPÓ
VISTOS:
Lo dispuesto en los artículos 60 N° 5 y 62 de la Constitución Política de la República; lo preceptuado por la Ley N° 18.918 Orgánica Constitucional del Congreso Nacional y por el Reglamento de la H. Cámara de Diputados.
CONSIDERANDO:
1 ° Que la muerte &8209;triste y lamentablemente&8209; ha puesto fin a la existencia terrenal de monseñor Fernando Ariztía Ruiz, obispo emérito de Copiapó, y sin lugar a dudas, y como más adelante lo expondremos, uno de los hombres más extraordinarios que Chile haya tenido la dicha de contar entre los suyos.
2° Que nuestro país, imbuido en una fuerte tradición democrática y republicana, siempre ha rendido solemne homenaje a las personas que se han destacado en forma especial, de modo que, perpetuando esta tradición, proponemos rendir un merecido homenaje a la memoria de monseñor Fernando Ariztía Ruiz, quién fuera durante 25 años Obispo de Copiapó y cuya figura está estrechamente ligada con esa diócesis, con su Iglesia y con los habitantes de la Región de Atacama.
3° Que la vida de don Fernando Ariztía, su legado, sus enseñanzas y su hondo espíritu de respeto al hombre, su profundo espíritu democrático y en especial su lucha por el respeto de los Derechos Humanos, son aspectos de la vida que merecen ser destacados. Tanto más cuando estos valores son cada vez más escasos y la memoria histórica cada día más débil. La historia de la vida de monseñor Fernando Ariztía es significativa. Nació en Santiago de Chile el 27 de mayo de 1925. Ingresó en el Seminario, donde fue ordenado sacerdote el 22 de septiembre de 1951, por el Cardenal don José María Caro. La figura potente de Don Fernando emerge en la década de los años 50 como el párroco de San Cayetano, que se identifica con la naciente población La Legua, posteriormente, párroco de la Santiago Apóstol, en el barrio de la Estación Central y principalmente, emerge como gran Asesor Nacional de la JOC, la Juventud Obrera Católica. Posteriormente fue Obispo Auxiliar de la Arquidiócesis, entre 1967 y 1976, y Vicario Episcopal de la Zona Oeste. Él fue una figura verdaderamente emblemática del episcopado nacional, que en los años más duros de la dictadura del general Pinochet participó activamente en la creación del Comité por la Paz, el cual presidió, y que más tarde diera paso a la Vicaría de la Solidaridad.
Monseñor Ariztía, fue nombrado a las pocas semanas...
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