Aunque es el más contaminante, la leña es el combustible más demandado por los chilenos
Por ello, la calefacción se convirtió en una de las mayores preocupaciones centrales de la población, que puede recurrir a un mercado que ofrece diversas alternativas, aunque con costos también muy diferentes.
Según un estudio realizado por el Ministerio de Energía, el 87,6% de los hogares chilenos usa algún tipo de calefacción. De ese porcentaje, los combustibles más demandados son la leña (42,9%) y el gas (42,6%), seguidos por la parafina (24,7%) y la electricidad (19%).
Sin embargo, las cifras cambian drásticamente según la región que se estudie, pues, por ejemplo, el uso de leña es mayoritario entre O'Higgins y Aysén (ver infografía).
Barata y contaminante
A pesar de la alta cantidad de emisiones que genera, la leña sigue siendo el combustible más utilizado en el país, pues 1.721.032 viviendas generan calor con ella.
Ernesto Gramsch, experto en contaminación de la Universidad de Santiago, advierte que "la mayoría de las ciudades del sur sobrepasan la norma de emisiones y el 80% del material particulado en esa zona es generado por la leña".
Según la investigación del Ministerio de Energía, los principales motivos de las familias para recurrir a la leña como combustible son que tiene un mayor poder calórico y es más barata.
Esto se condice con la Guía de Calefacción Sustentable, publicada por la cartera, que plantea que el costo promedio mensual de calefaccionar durante ocho horas diarias con leña es de $31 mil, mientras que con parafina llega a $43 mil. Aún más caros son el gas licuado ($65 mil) y la electricidad ($136 mil).
En cambio, al indagar en razones para no usar leña, un 31% de los consultados asegura que es porque está prohibido; un 21% dice no requerirlo, y un 12% lo atribuye a la contaminación que genera.
Andrés Pica, jefe de la División de Calidad del Aire del Ministerio de Medio Ambiente, recuerda que, actualmente, hay 14 nuevos planes de descontaminación que se están implementando en el mismo número de ciudades. Añade que "en el caso de la leña, (la medida) implica permitir solo la venta de leña certificada, ya que al estar seca disminuye las emisiones de material particulado en la atmósfera. Esto se complementa con el recambio de calefactores por estufas de alta tecnología, más eficientes y con combustibles menos contaminantes, como el pellet, el gas y la parafina".
Para Luis Cifuentes, experto en contaminación atmosférica de la Universidad Católica, "lo ideal sería dejar de usar leña, porque no hay manera de quemarla sin...
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