La antesala de un vuelo fatal
Eduardo Behrmann pasa sus dedos largos sobre la pantalla de su iPad. Las imágenes que exhibe muestran aviones, pistas de despegue, de aterrizaje, militares, mar, vegetación, construcciones en madera y amigos. Sentado en un café de Vitacura, los ojos azules de este empresario brillan cuando los menciona. Se detiene en una en que están abrazados, entre otros, Felipe Cubillos y Joaquín Arnolds. Luego hará lo mismo con una en que aparece Sebastián Correa.Los tres están fallecidos.-Seba era el arquitecto de Desafío Levantemos Chile. La mala suerte... la única vez que invitó a su señora para que conociera la isla fue cuando se cayó el avión -reflexiona Behrmann-. Él había ido muchas veces, le encantaba Juan Fernández, construyó el pequeño comercio, era entregado total a obras sociales, las hacía ad honorem ; tenía tres hijos y en el viaje que seguía a este le dijo a su mujer: "¿Sabes qué más, Cata?, te llevo". Esta es la foto del día que llegamos... mira el día que nos tocó.La imagen que muestra fue tomada a fines de junio de 2011. El cielo está gris, la postal tiene señales de gotas de lluvia en el lente y su pelo está erizado por el viento. Correa, abrigado, sonríe.Desafío Levantemos Chile es la obra de Felipe Cubillos, un empresario filántropo, aventurero, navegante, que tras el terremoto y tsunami del 27 de febrero de 2010 decidió que había que ayudar a la reconstrucción y se lanzó a convencer a jóvenes voluntarios y a personas con dinero, creativas, con capacidad de gestión y contactos, que participaran en su fundación.A casi todos ellos los reclutó durante un almuerzo. O al menos así fue con Eduardo Behrmann, un empresario del sector de servicios con pasado reciente en medios de comunicación; Roberto Bravo, dueño de un aserradero que impulsó en un liceo de Curanilahue un sistema de apoyo que incluyó la creación de la primera orquesta juvenil de Chile; con el publicista Felipe Ríos y el cantante Keko Yunge."Al día siguiente del terremoto hice una canción y la grabé. Era un mensaje a la gente que había vivido todo esto, que había perdido familias o propiedades. Esta canción la escuchó Felipe Cubillos, me llamó para invitarme a que la cantáramos en todos lados", explica Keko Yunge al teléfono desde Tailandia.La letra de "Arriba los sueños" es una invitación a trabajar juntos para ponerse de pie. Su video, disponible en YouTube, fue grabado en Juan Fernández."Con Felipe nos habíamos visto algunas veces, pero no teníamos una relación cercana. Ya después nos hicimos muy amigos. Éramos muy parecidos en la manera de mirar y hacer las cosas", agrega el músico.Behrmann, Bravo, Ríos y Yunge coinciden en que 2010 y 2011 fueron una "locura". Recuerdan que estaban con tantos proyectos a la vez que era común salir muy temprano a alguna localidad de las regiones de O'Higgins, Maule o Biobío; trabajar hasta muy tarde en una escuela o caleta; reunirse con autoridades y empresarios; compartir y hasta comerse un asado con los vecinos. Luego, subirse al vehículo que estuviera disponible a la hora que fuera para acudir a otra zona...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba