Un animal exótico en la publicidad
Dittborn está sentado en su oficina con ventanales que miran hacia Isidora Goyenechea, donde la empresa ocupa un piso entero, con sus espacios blancos y elegantes y sus muebles refaccionados y sillones sesenteros.
Pero su historia parte antes de los premios. Antes de la fotografía: ha montado un par de exposiciones. Antes del cine: ha sido productor de Fugay Tony Manero. Su historia parte antes que él naciera. Parte con su padre, Carlos Dittborn, que muere sorpresivamente el 28 de abril de 1962 de una pancreatitis aguda. El hecho no deja de ser dramático, porque tenía sólo 38 años, y porque, antes que nada, tenía seis hijos. El hecho no deja además de ser fortuito y maldito: Carlos Dittborn llevaba un par de años haciendo lobbypara que el Mundial de Fútbol llegara a este país, que porque no tenía nada quería hacerlo todo, como se cuenta que alguna vez dijo. Y aunque logró la hazaña, no alcanzó a verla.
El Mundial de Fútbol de 1962, en el que Chile saldría en un glorioso tercer lugar, comenzó el 30 de mayo con sentidos homenajes al fallecido. La pelota que se usó para la inauguración del campeonato, por ejemplo, fue guardada por el entrenador Fernando Riera, firmada por todo el equipo nacional, y luego entregada a la viuda de Dittborn, Juanita Barros.
Ella, a poco más de una semana de iniciado el torneo, el 9 de junio de 1962, dio a luz al séptimo de sus hijos. El hijo póstumo: Tomás.
-La imagen de mi papá, para mí, al principio fue una muy pública, hecha por recortes de diario -dice Tomás Dittborn hoy, a los 48 años, vistiendo polera y zapatillas-. Sobre todo cuando yo era muy chico y el Mundial estaba muy fresco. Igual tenía cosas buenas, era sentirse orgulloso a cada rato.
-Y su famosa frase: "Porque no tenemos nada queremos hacerlo todo", ¿es mito? ¿La dijo o no?
-Es lo que siempre sucede con cualquier hecho histórico, se va amoldando cuando pasa el tiempo. No sé si dijo exactamente eso, pero lo que sucedió en Lisboa es que después de Argentina, que había hecho una postulación magnífica porque era un país rico y todo, mi papá se enganchó de eso. Nosotros, que somos un país pobre, porque no tenemos nada queremos hacerlo todo, queremos construir estadios. Así que si fue exacta la frase, no sé, pero es mucho más bonita así, como se terminó armando, a como podría haber sido la original.
-Ser hijo de alguien que hizo cosas grandes, ¿lo obliga a decir, 'yo debería hacer algo con mi vida'?
-Sí. La herencia paterna es muy fuerte.
Después de que...
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