El amor de Anita y Andrés - 17 de Junio de 2017 - El Mercurio - Noticias - VLEX 682923861

El amor de Anita y Andrés

Alberdi recuerda que ahí llegó a su "límite ético" y dejó de grabar. Habló con Carmen para calmarla mientras un camarógrafo se acercó a Anita y le dijo que para casarse hay que pololear por mucho tiempo y que, después, se puede ser novia. Le dijo que Andrés podría regalarle un anillo y eso, al menos por ese día, la calmó. Siguieron con el documental. La escena nunca llegó a la pantalla.

Andrés

El hijo número 11 del matrimonio entre Eugenio Martínez y Ximena Cortés fue Andrés. Era 1971, el parto fue normal y solo detectaron algo raro cuando él tenía un mes y se atoró mientras lo amamantaban. Su madre llamó a su doctor de cabecera, él mismo que lo vio después del parto, pero él dijo que no podía atenderlo y nunca más lo volvieron a ver. Los padres de Andrés lo llevaron a urgencias del hospital Calvo Mackenna, donde lo hospitalizaron por una noche. Su mamá, que tenía problemas de vista severos, creía que su último hijo podía ser ciego.

-Cuando llegaron de vuelta del hospital, nadie nos dijo el diagnóstico de Andrés. Me di cuenta de que pasaba algo cuando escuché a mi papá llorar encerrado en su pieza -dice María Soledad, hermana de Andrés.

Los padres de Andrés no le explicaron a sus 10 hermanos que él tenía un trastorno genético conocido como síndrome de Down, causado por una copia extra del cromosoma 21 -o una parte de este- en vez de los dos habituales. Según la encuesta Casen de 2011, 239.715 chilenos tenían discapacidad intelectual, y según Fanny Cortés, genetista del Centro de Apoyo al Síndrome de Down de la Clínica Las Condes, "1 de cada 470 niños nacidos en Chile tiene síndrome de Down. Y su sobrevida ha aumentado progresivamente durante las últimas décadas, sobrepasando en la actualidad los 60 años".

En los 70, Eugenio y Ximena pensaron que la expectativa de vida de su hijo sería acotada y se preocuparon de que él fuera feliz: como decía que "no" cuando le pedían leer o escribir, nunca aprendió a hacerlo. Tuvo una enfermera profesional y como le gustaba cantar lo inscribieron en el coro de una iglesia, donde podía expresarse libremente.

A los 5 años lo operaron del corazón. No era un caso aislado, según información del centro UC Síndrome de Down, 50 por ciento de las personas con el trastorno genético nace con una cardiopatía congénita.

Ese mismo año, él entró a la Corporación Coocende, un centro educacional especial y laboral para personas con situación de discapacidad intelectual ubicado en Las Condes. Sus padres ayudaron a levantar el colegio, donde por 41 años Andrés fue alumno. Sus hermanos lo molestaban por ser "mujeriego" con sus compañeras y cambiar constantemente de polola. Begoña, Isabel, Carmen, Cecilia, Pamela, Ximena, Soledad y Jazmín son algunas de...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR