La alta cocina española se rinde a las tapas low cost para combatir la crisis
Según un estudio de "eltenedor.es" -portal de reservas online y guía gastronómica en España, Francia, Bélgica y Suiza-, las reservas de grupo han crecido 52% en comparación con los datos registrados en 2013.
Además, la mejora en el sector de la hostelería se refleja en las previsiones sobre las ventas y la cifra del empleo. Después de seis años consecutivos de caídas, el volumen de negocio de los bares y restaurantes españoles apunta a un cierre de 2014 en positivo, ya que la media anual de crecimiento hasta septiembre se sitúa en el 3,4% respecto al año anterior, tal y como recoge la Federación Española de Hostelería (FEHR), de acuerdo a los datos del INE.
En cuanto al empleo, la Encuesta de Población Activa (EPA) revela que en el tercer trimestre de este año es superior a 1,5 millones de trabajadores, lo que supone un incremento del 5,9% respecto al 2013 y se traduce en 85 mil trabajadores más.
Estos síntomas de recuperación, sin embargo, no son percibidos por la mayoría de los ciudadanos, quienes en la última encuesta del CIS consideran que aún la situación económica es "mala o muy mala". Así, es fácil observar un bar lleno de gente charlando sobre la crisis, mientras disfrutan de las populares tapas.
Y es en estos aperitivos, que se caracterizan por sus precios asequibles y por acompañar a las bebidas, donde muchos restaurantes tradicionales han encontrado la "receta" para combatir la disminución del consumo de ocio y conservar su clientela.
Otros han optado por trabajar con materias primas más económicas, por abrir paso en sus cartas a las raciones para compartir o por ofrecer menús ejecutivos. La reinvención de la alta gastronomía irrumpe en las cocinas en cualquier rincón de España.
Andra Mari: Al rescate de los productos "olvidados"
Con cincuenta años en sus fogones, el restaurante Andra Mari se ha convertido en un referente de la gastronomía vasca. Comenzó su andadura en Galdakao, Vizcaya, en forma de taberna al abrigo de un caserío, como se denominan las viviendas típicas de campo en el norte de España.
Pese a ser un clásico de su región, el establecimiento creado por los hermanos Asúa -Patxi, Dominga y Juan Cruz- también ha tenido que adaptar su recetario y su oferta a los tiempos de crisis.
Roberto Asúa, hijo de Patxi y quien regenta hoy el restaurante, explica que la situación actual ha provocado la vuelta a materias primas que de algún modo se habían relegado a un segundo plano.
"Utilizamos productos más humildes, que en época...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba