A 30 años de la caída del muro de Berlín: ¿la política ha vuelto? - 6 de Octubre de 2019 - El Mercurio - Noticias - VLEX 816658885

A 30 años de la caída del muro de Berlín: ¿la política ha vuelto?

A 30 años de la caída del muro de Berlín: ¿la política ha vuelto?sigue en e 4La idea de apocalipsis ha vuelto a estar vigenteLa caída del muro de Berlín significó el fin de un mundo dividido en dos bloques y, por ende, la apertura del horizonte histórico a significados aún impensados. A treinta años, nuestra relación con la indeterminación de la historia ha cambiado porque se ha modificado nuestra relación con el fin. Los pronósticos acerca del calentamiento climático anuncian que la vida podría acabar pronto, tiempo en el cual toda vida sería expuesta sin amparo al sufrimiento. De esta manera, si bien el fin de los dos bloques, así como de una idea teleológica de la historia, nos abrían a un tiempo infinito, hoy día estaríamos confrontados, sino al tiempo del fin, por lo menos al problema de un fin del tiempo. En treinta años, la idea de apocalipsis no solo ha vuelto a estar vigente, sino que ha adquirido un nuevo significado: en vez de la noción religiosa de un tiempo del juicio que condena pero también salva, asistimos a una amenaza relativa a la vida en general, a una pérdida de horizonte y de promesa que podría ser definitiva.Esta reintroducción del fin en la indeterminación del horizonte histórico, esta mutación de una idea de fin pensada como sentido y horizonte a un fin pensado como extinción, da paso a una mutación en nuestra relación con la política. Mientras el posestructuralismo nos invitaba a pensar que el hombre era una invención que estaba destinada a pasar y por ende a abrir nuevos horizontes, hoy día nos rehusamos a pensar que la vida también es una construcción. Al contrario, nos remitimos enteramente a la ciencia, tanto con respecto al significado que otorgamos a la palabra vida como a los pronósticos que podemos hacer sobre esta última. En este contexto, nuevas ideologías están emergiendo porque ya no pensamos al ser humano y la vida en términos históricos y como una multiplicidad de relatos posibles, sino la historia y el ser humano en función de la vida y su sustentabilidad. La necesidad de cuidar el planeta es indudable y es fuente de nuevas formas de ser. El problema es que al remitirnos enteramente a la ciencia olvidamos que son los relatos los que construyen el mundo y que la finitud, en su carácter inaprensible, es lo que nos relaciona y nos abre. El fin del mundo es también el desastroso proyecto de dominar el fin y de forjar una humanidad sin finitud.Aïcha Liviana Messina es filósofa, profesora titular de la...

Para continuar leyendo

Solicita tu prueba

VLEX utiliza cookies de inicio de sesión para aportarte una mejor experiencia de navegación. Si haces click en 'Aceptar' o continúas navegando por esta web consideramos que aceptas nuestra política de cookies. ACEPTAR