Turistas argentinos aterrizan los principales problemas económicos de su país
Pilar, Daniela, Andrea y Valeria tienen 24 años, son compañeras de Derecho en la Universidad Nacional de Cuyo en Mendoza y hace tres días que llegaron a Reñaca. Sólo han gastado 30 mil pesos chilenos en transporte. Pagaron en efectivo los 140 mil pesos en total que les costó el departamento por seis noches y la comida la trajeron desde su país. Así, explican, se hacen menos necesarios los dólares, escasos o difíciles de conseguir en Argentina.
Este país ha vivido fuertes cambios económicos en los últimos años, bajo el gobierno de Cristina Fernández. Hay una fuerte intervención del Estado, aislacionismo internacional debido a la restricción de las importaciones y una inflación que según lo informado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos de Argentina (Indec) en 2012 fue de 10,8%, aunque economistas como Gabriela Nudel, del centro de investigación Fundación Capital, dicen que la cifra real parece estar más cerca del 26%. Los pronósticos para Argentina este año son recesivos, aunque la consultora argentina ABECEB prevé un crecimiento de 3%.
Para aterrizar este complejo escenario económico, "El Mercurio" fue a Viña del Mar, tradicional lugar de veraneo de argentinos, para saber cómo ven y evalúan la situación de su país. Entre los entrevistados, unos sesenta turistas, realizamos, además, un sondeo: un 65,5% califica la situación económica de su país como regular o mala; un 65% cree que su situación personal es buena y casi un 54% reconoce que compró los dólares para venir a Chile en el mercado negro (ver gráficos).
No siempre, eso sí, fue fácil conseguir una opinión de los trasandinos. Muchos se abstuvieron de decir su nombre y no quisieron ser fotografiados, nerviosos por las posibles repercusiones en Argentina, argumentaron.
Argentina siempre ha sido así: sube y baja
En una mañana nublada, muchos argentinos parten al mall Marina Arauco. Rubén Nogal trabaja en el Ministerio de Salud trasandino y es tercera vez que viene a Chile. No se considera oficialista pero sí apoya algunas de las medidas económicas y sociales del gobierno de Fernández. Dice entender la alta inflación si hay trabajo y valora que Argentina hoy, a diferencia de ayer, "no le pida un mango a nadie".
Gustavo Vanneschi viene de Cuyo. Como empresario gastronómico, no ha tenido mayores problemas en su rubro, dice, pero reconoce que sí los hay en otros sectores. "Al cerrarse Argentina a las importaciones, muchos quedaron fuera... y al comerciante que vive de las ventas locales le va mal, porque la gente no está muy bien.
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