Singapur en cámara lenta - 7 de Noviembre de 2021 - El Mercurio - Noticias - VLEX 877894931

Singapur en cámara lenta

U n aeropuerto-hospital.La llegada al terminal Changi, el principal recinto aéreo de Singapur, es desoladora y fantasmagórica.Uno de los aeropuertos más modernos y espectaculares del mundo, ese mismo que el año 2019 registraba el frenético movimiento de 68 millones de pasajeros, durante lo que va de este 2021 apenas ha visto un poco más de un millón 300 mil viajeros recorriendo sus instalaciones.Las mangas ahora aparentan ser cuncunas encogidas que ya no abrazan fuselajes de aviones. Y en la losa apenas se ven algunas aeronaves en tránsito, mientras que a los lejos se divisan decenas de aviones estacionados y en silencio. De hecho, el movimiento de aeronaves en lo que va de este año ha caído a la mitad de los que se registraron el 2020, año que ya había tenido una baja de casi dos terceras partes de los aparatos que habitualmente llegaban y salían de esta ciudad-Estado de 5.5 millones de habitantes.El viaje a Singapur lo he podido concretar después de varios meses de tratativas con diferentes estamentos administrativos locales y un cúmulo de documentos y papeles que han debido ser llenados y actualizados una y otra vez. También de pasajes y conexiones que han debido actualizar sus fechas en varias ocasiones.No importa que el 84 por ciento de la disciplinada población de Singapur haya completado su esquema de vacunación: el país lleva meses convertido en un pedazo de tierra de casi 729 kilómetros cuadrados al cual apenas se puede acceder. Y del cual tampoco se puede salir con facilidad.No es más que el reflejo de una nación que siempre se ha caracterizado por la fiereza de sus normas, la dureza de las penas a quienes las quebranten y el apego a las disposiciones de una población disciplinada. Sucedió en la etapa más dura de la pandemia con las normativas relacionadas con el distanciamiento social y los mandatos para quedarse en casa: a quien fuese sorprendido infringiendo los protocolos se le imponía una multa de unos seis millones de pesos y una pena de prisión efectiva de seis meses. Si era reincidente, la multa subía a doce millones de pesos y un año de cárcel.Con mano firme y control férreo, Singapur enfrentó y sigue enfrentando la pandemia. Sus números (al cierre de esta edición) dan cuenta de 294 muertes y casi 166.000 contagios.Vivir de a dosEl aviso de autorización para ingresar a Singapur ha llegado después de meses con varias negativas. Con esa venia, los pasajes aéreos han debido ser rápidamente ajustados ya que existe apenas una mínima ventana de un par de días para entrar al país. Si es que no se hace entre las fechas entregadas por el gobierno, todo se va al tacho de la basura y se debe recomenzar otra vez con el papeleo.Además, hay que tener razones muy específicas para poder entrar a Singapur, junto con comprobar vínculos con ciudadanos o residentes permanentes. Y, aunque se cumpla con esos requisitos, cada caso...

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