La semana política - 4 de Junio de 2017 - El Mercurio - Noticias - VLEX 682010197

La semana política

El juicio de la Presidenta y el de los ciudadanos

Discutible como cuenta sobre la marcha del país, el discurso presidencial del jueves fue, sin embargo, revelador del modo en que el Gobierno se concibe a sí mismo y cómo ello ha condicionado su acción y el magro resultado de sus políticas. La Mandataria insistió en resaltar el carácter "histórico" de las reformas impulsadas. Ello, a partir de un sombrío diagnóstico de la situación al inicio de su período y del convencimiento de que esas reformas serían la única manera de superar tal estado, al punto que "si aceptáramos volver atrás, la desconfianza y el malestar seguirían siendo una pesada carga para todos". En ese contexto, la resistencia que sus iniciativas han despertado -y que la coincidente difusión de la última encuesta CEP ha venido a confirmar- solo sería la consecuencia de afectar "intereses particulares" para efectuar cambios respecto de cuya necesidad no cabría duda.

Confluyen en esa visión el ideologismo y una óptica voluntarista, que minimiza aquellos aspectos de la realidad que pudieren contradecir su convencimiento del "buen camino" seguido. Ciertamente, es legítimo que la Presidenta estime que hoy Chile se encuentra mejor que al momento de asumir ella el mando, incluso si la mayoría de las personas piensa lo contrario, como lo demuestra la escuálida aprobación del Gobierno (cifrada por el CEP en 18%). Más complejo es, sin embargo, cuando a ese cuestionamiento popular se agrega la suma de indicadores negativos que acumula esta administración: desplome de la inversión, alza en las cifras de victimización delictual, precarización del empleo, estancamiento en la calidad de la educación.

Frente a ello, es poco lo que el discurso pudo exhibir para avalar el entusiasmo de la Mandataria. Porque si bien cabe reconocer cuestiones aisladas, como el éxito de la política energética o el auge alcanzado por la industria turística, parece aventurado sostener que en este período se hayan sentado bases para un "crecimiento más elevado y sustentable", cuando en los hechos el país ha experimentado una aguda ralentización y cuando las iniciativas de esta administración han incidido de modo decisivo en ello, al rigidizar el mercado laboral, desincentivar la inversión e introducir incertidumbre en los pilares institucionales del desarrollo. Así, la satisfacción gubernamental por lo obrado parece sostenerse de modo casi exclusivo en el hecho mismo de haber llevado a cabo reformas, prescindiendo de...

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