Persiguiendo a Ringo Starr en Punta del Este
Javier Lubelski llegó anoche a Punta del Este, el balneario más taquillero de Uruguay, para ver el show privado que Ringo Starr, el legendario baterista de los Beatles, dará en el Conrad. A Ringo lo contrataron para celebrar el 16° aniversario de este hotel-ícono que acaba de remodelar su casino, y que ahora está administrado por la empresa chilena Enjoy. En el escenario del Conrad el ex Beatle tocará por primera vez en Uruguay, pero muy pocos lo podrán ver. Pobres fans uruguayos. Aunque tengan las ganas, aunque tengan la plata, las entradas no están a la venta. Al concierto de hoy, que incluye un farandulero cóctel de bienvenida y el simbólico corte de una torta de siete pisos, sólo se llega con invitación.
Por eso, entre quienes podrán ver a Ringo en vivo y en directo está el ex Presidente uruguayo Jorge Battle, el bailarín Julio Bocca, el diseñador Roberto Giordano, la actriz brasileña Daniela Escobar, el empresario chileno Ricardo Abumohor, y una serie de modelos, animadores de televisión, empresarios, músicos y periodistas argentinos, uruguayos y chilenos, unos más conocidos que otros, que se pasearán en el cóctel previo con sus regios ternos y ajustados vestidos, haciendo relucir ante los flashes sus pelos teñidos, sus pechugas falsas, sus rostros inflados con Botox.
Javier Lubelski, desde luego, no estaba en la lista original, pero como es fanático con F mayúscula consiguió entrada gracias a un pariente que vive en Estados Unidos y que es amigo de Greg Bissonette, el baterista de la All-Starr Band, grupo que acompaña a Ringo Starr y que integran otras estrellas como Steve Lukather, guitarrista fundador de Toto, y Greg Rollie, tecladista de la primera alineación de Santana, el mismo que sale en el video de Woodstock, con 44 años menos.
-Mi pariente le dijo a Greg Bisonette: 'Javi es el más rompebolas con los Beatles. Por favor conseguíle una entrada'. Y me la consiguió. Pero no tengo derecho al cóctel. ¿Vos entrás, no? A ver si nos conseguís unas empanadas.
Javier Lubelski lleva todo el día sentado en el lobby del Conrad, esperando a alguno de los músicos de la banda para pedirles un autógrafo. Ya tiene el de Steve Lukather, el de Greg Rollie y el de Greg Bissonette, que se han paseado toda la mañana por los pasillos. Pero con Ringo no tiene muchas esperanzas. Ringo no se muestra, dice. No como Paul McCartney, a quien interceptó justo llegando a su hotel en la ciudad brasileña de Goiania, después del show que dio allí el 6 de mayo de...
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