Peritajes señalan que mal uso de los frenos provocó el accidente en avenida de ingreso a Valparaíso
El hecho ocurrió a las 10.30 horas, cuando el conductor de un bus de la empresa Pullman Bus Lago Peñuelas perdió el control de la máquina y volcó, aplastó a una camioneta de Carabineros y colisionó luego con un automóvil.
El chofer Alfredo Mauricio Castaings Inostroza, de 47 años, fue formalizado ayer en la misma audiencia de control de detención realizada al mediodía, en el Juzgado de Garantía de Valparaíso. El fiscal Gonzalo Marks le imputó cargos como autor de cuasidelito de lesiones menos graves, graves y graves-gravísimas "en concurso ideal", como se denomina jurídicamente cuando con un solo acto se cometen varios delitos.
Dijo que las primeras pericias comprueban que Castaings bajó la cuesta de Santos Ossa pisando constantemente los frenos, lo que provocó que los sistemas de frenado del bus se calentaran y dejaran de funcionar. Lo que califica el cuasidelito -explicó- "es conducir de mala manera y a una velocidad no adecuada en este sector, lo que le impide realizar la maniobra de frenado".
Marks sostuvo que si bien la mayoría de los pasajeros llevaba puesto el cinturón de seguridad a la hora del accidente, "hay al menos dos pasajeros que señalaron que sus asientos no contaban con cinturón de seguridad".
El imputado quedó con medidas cautelares de arresto domiciliario nocturno, arraigo nacional y firma mensual. Sin embargo, no pudo recuperar su libertad, ya que mantenía una orden de detención pendiente de un tribunal de Santiago, por estafa.
El fiscal señaló que Castaings registra antecedentes judiciales anteriores por otros delitos, pero que "son antiguos y no son un agravante en ningún caso".
El defensor Humberto Ramírez, quien representa al chofer, señaló que será el proceso el que determinará si este tiene responsabilidad en la falla de los frenos. "El chofer se da cuenta de que no puede frenar, le avisa al auxiliar y este procede a comunicarles a los pasajeros para que tomaran los resguardos", manifestó.
Ramírez no entregó detalles de lo que le refirió su representado sobre lo ocurrido por "el debido secreto profesional".
La esposa de Castaings dijo, al retirarse del tribunal, que su marido cuenta desde hace 20 años con licencia profesional para conducir, que no tenía contrato con la empresa propietaria del bus, que antes trabajó en el Transantiago y que la máquina había estado en reparaciones. Ayer no fue posible obtener una versión de Pullman Bus Lago Peñuelas.
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