Muere Fernando de la Rúa, el Presidente que protagonizó la peor crisis de Argentina - 10 de Julio de 2019 - El Mercurio - Noticias - VLEX 798377393

Muere Fernando de la Rúa, el Presidente que protagonizó la peor crisis de Argentina

El expresidente argentino Fernando de la Rúa (1999-2001), cuyo gobierno cayó en medio de la peor crisis económica y social de la historia reciente del país, murió ayer a los 81 años, tras una larga convalecencia por problemas cardíacos y renales. Sus restos eran velados en el Salón de los Pasos Perdidos del Congreso, y hoy serán sus exequias en un cementerio de la localidad bonaerense de Pilar.De la Rúa protagonizó uno de los períodos más convulsos de la política argentina, una revuelta social durante la que se acuñó la frase "Que se vayan todos", tras llegar a la Casa Rosada en diciembre de 1999 en medio de enormes expectativas por su promesa de terminar con la corrupción y dar un giro hacia la centroizquierda respecto a las políticas neoliberales de la década del expresidente peronista Carlos Menem (1989-1999).Al asumir, pocos dudaban de sus credenciales. Líder de un sector conservador de la socialdemócrata Unión Cívica Radical y rival dentro del partido del expresidente Raúl Alfonsín (1983-1989), fue senador y diputado en varios períodos, ya había sido candidato a vicepresidente en 1973 -cuando enfrentó a Juan Domingo Perón- y había logrado notoriedad como alcalde de Buenos Aires entre 1996 y 1999."Dicen que soy aburrido... será porque no manejo Ferraris", ironizaba en su popular spot de campaña, en el que De la Rúa sacaba provecho de su perfil recatado, se ponía en las antípodas del "derroche menemista" y prometía "terminar con la fiesta para unos pocos".Pero De la Rúa heredó una situación financiera muy compleja. La economía ya había entrado en recesión, el déficit fiscal era cada vez más inmanejable y la deuda externa se había disparado. Y medidas como su plan de ajuste -que incluyó recortes a las jubilaciones y a los salarios de empleados públicos- y el aumento de impuestos no fueron capaces de solucionar los graves desequilibrios económicos. Lo contrario: empeoraron.Pronto se hizo evidente también su debilidad política. Un escándalo de corrupción en el Senado -un caso de sobornos para aprobar una polémica reforma laboral- provocó en 2000 la renuncia de su vicepresidente, Carlos Álvarez, fracturó su coalición y golpeó el capital de un político que se había presentado como una "fuerza moral frente a la frivolidad y el engaño". Muchos radicales se alejaron, y el peronismo vio la oportunidad de tomar ventaja en medio de un ánimo social cada vez más crispado.En 2001, una serie de reformas infructuosas y la renuncia de dos ministros de...

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