Evo Morales busca hoy un rotundo triunfo que le permita gobernar Bolivia sin oposición
Enviado especial
Sin rivales que le hagan sombra, Evo Morales avanza arrollador hacia un triunfo en las elecciones de hoy en Bolivia, en las que todo apunta a que ganará un tercer mandato presidencial para consolidar su "socialismo originario e indigenista", un controvertido proyecto, acusado de tener tintes autoritarios, que presenta como principal argumento a favor los mejores indicadores económicos en décadas en el país.
"Con Evo vamos bien", dicen las gigantografías con su rostro que adornan carreteras, obras públicas e instituciones del país. Es el eslogan de campaña con el que Morales ha querido sintetizar sus más de ocho años al frente de la nación. El sentir en las calles parece darle la razón: impulsado por la estabilidad económica, la división de sus rivales y su innegable carisma, el aún líder cocalero lidera todos sondeos con 40 puntos de ventaja sobre su más cercano adversario, el empresario Samuel Doria Medina (Unidad Democrática), quien aparece con el 14% de la intención de voto. Más rezagados están el ex Presidente Jorge Quiroga (2001-2002, del Partido Demócrata Cristiano), con el 7%; el ex alcalde de La Paz Juan del Granado (Movimiento Sin Miedo), con el 3%, y el líder indigenista de la Amazonia, Fernando Vargas (Partido Verde), con el 1%.
"Les vamos a dar un mazazo a los imperialistas, a los neoliberales, a los vendepatrias y a los separatistas", clamó el ex sindicalista de 54 años en su cierre de campaña en El Alto, su principal bastión.
Morales busca batir su marca electoral de las elecciones pasadas, cuando venció con el 64% de los votos, pero también ha apuntado a estirar las diferencias para asegurarse la hegemonía en la Asamblea Legislativa Plurinacional, como en los últimos cinco años. Su objetivo, según adelantó, es alcanzar el 80% de los sufragios y evitar el llamado "voto cruzado": en las elecciones de 2009, el 28% de los electores cruzaron su voto apoyando en la Presidencia a Morales, pero optando por un candidato opositor para la diputación.
Con el control del Congreso, Morales podría tener carta libre para modificar la Constitución, en particular, según teme la oposición, para habilitar la reelección presidencial indefinida.
También Morales quiere ganar Santa Cruz, región autonomista y la zona más rica del país, que le opuso dura resistencia en sus primeros años de gobierno. Los expertos no descartan que podría triunfar ahí y superar el 50% de los votos.
El analista político paceño Jorge Lazarte dijo a "El...
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