Ingreso mínimo garantizado: un paso en la dirección correcta - Núm. 1426, Noviembre 2019 - Temas Públicos - Libros y Revistas - VLEX 827452625

Ingreso mínimo garantizado: un paso en la dirección correcta

Páginas1-6
LIBERTAD Y DESARROLLO
TEMAS PÚBLICOS
www.lyd.org
Nº 1426 - 2
22 de noviembre de 2019
ISSN 0717-1528
1
INGRESO MÍNIMO GARANTIZADO:
UN PASO EN LA DIRECCIÓN CORRECTA
El 7 de noviembre pasado, el Gobierno ingresó a trámite un proyecto de ley que
crea un subsidio para alcanzar un Ingreso Mínimo Garantizado. Este subsidio sigue
la estructura de los subsidios al empleo vigentes en nuestro país, como el subsidio
al empleo joven, creado en virtud de la Ley N° 20.338, y el bono al trabajo de la
mujer, creado por la Ley N° 20.595. El subsidio al empleo joven está dirigido a
trabajadores dependientes e independientes que tengan cotizaciones al día,
pertenezcan al 40% más vulnerable de la población según el Regi stro Social de
Hogares, se encuentren entre los 18 y menos de 25 años y perciban una renta bruta
mensual igual o inferior a $ 474.966. El monto máximo del subsidio es de $ 31.664
mensual. En el caso de bono al trabajo de la mujer, los requisitos son tener entre 25
y 59 años, pertenecer al 40% más vulnerable de la población según el Registro Social
de Hogares y ser trabajadora dependiente o independiente con cotizaciones
previsionales y de salud al día. La renta bruta mensual no puede ser superior a
$ 474.966 y el monto máximo del subsidio es también de $ 31.664 mensual. Cabe
hacer presente que en el caso de estos dos subsidios el aporte estatal no es
tributable ni imponible.
El nuevo subsidio que este proyecto de ley crea para alcanzar un ingreso mínimo
garantizado consiste en otorgar un aporte monetario directo de cargo fiscal no
tributable ni imponible, a todos los trabajadores formales dependientes con jornada
Se inició la discusión parlamentaria sobre el proyecto que crea el Ingreso Mínimo
Garantizado, nuevo subsidio que podría llegar a ser equivalente a $ 49 mil mensuales para
los que perciben el salario mínimo y que está en línea con el actual subsidio al empleo joven
y a mujeres.
Sin embargo, algunos parlamentarios plantean que es preferible como alternativa subir el
sueldo mínimo desde $ 301 mil a $ 350 mil o más. Esto es una mala idea ya que la realidad
de las pymes no les permite enfrentar un incremento de esa magnitud.
De igual manera, establecer salarios mínimos o ingresos mínimos diferenciados por tamaño
de empresa tampoco es una buena idea, dados los incentivos perversos que se generan.

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