'Sería inconcebible, teniendo opción de ganar la presidencial, no tener mayorías en el Congreso'
"Fue una decisión difícil de tomar porque son 27 años dedicado al Congreso, y porque -según todas las encuestas- tenía un importante respaldo ciudadano. Y aquí hay dos maneras de irse del Congreso: cuando a uno lo echan o cuando uno se va voluntariamente. Y yo tomé esta decisión con la más absoluta convicción", dice Espina, instalado en su casa en Lo Barnechea. Enfrentó cinco elecciones, tres como diputado por el distrito de Ñuñoa y Providencia, y dos como senador por La Araucanía, y por años tuvo rol protagónico asumiendo en el Congreso los temas de seguridad ciudadana y narcotráfico.
"Representar a La Araucanía es apasionante, pero también extraordinariamente duro. Yo recibo a lo menos una o dos veces a la semana llamadas a mi celular de personas que están siendo, en ese momento, objeto de algún ataque de violencia", explica el senador, hoy transformado en uno de los hombres de confianza del ex Presidente Sebastián Piñera.
-¿Cuáles fueron sus razones para decidir irse del Congreso?
-En política se tiene que trabajar en equipo. En consecuencia, es necesario facilitar el recambio de los liderazgos en el Senado y abrir los espacios para que surjan esas nuevas figuras. En el caso de La Araucanía, llevamos dos excelentes candidatos -como Germán Becker y José García Ruminot-, y este recambio ya se había iniciado cuando elegimos diputado a Diego Paulsen, con 25 años. La segunda razón es que estamos enfrentando la elección presidencial más importante desde el retorno a la democracia: o definitivamente el país sigue en manos de quienes han hecho un gobierno mediocre, o somos capaces de tener un gobierno -para el que nos estamos preparando- que signifique un progreso económico, pero acompañado de la solidaridad social.
Hay opciones ciertas de ganar el tercer cupo en La Araucanía
-¿Por qué no es compatible trabajar por su reelección y, en paralelo, hacer esfuerzos para que Piñera salga electo?
-Es que cuando tú eres candidato a senador tienes que dedicarte 10 horas al día a tu campaña, a recorrer todas las comunas, y también porque sinceramente creo en el recambio.
-¿También considera la posibilidad de asumir un cargo en el gobierno? ¿Qué le gusta más: Justicia o Interior?
-Mire, yo trabajo muy cerca del Presidente Piñera en su comando y hay una regla de oro que nosotros tenemos que respetar y es que de cargos se habla cuando se ganan las elecciones. Es de una arrogancia infinita empezar a repartirse cargos antes de que eso suceda. !Por favor¡ !Respeto a los electores¡ Nuestra mente tiene que estar concentrada en ganar la elección... !Y atención¡, porque en la confianza está el peligro. Sin duda tenemos la primera opción de ganar, pero las elecciones no se ganan con encuestas sino con votos. Lo importante es que la ciudadanía vaya a votar y que empatice con nuestro proyecto.
-En el gobierno de Piñera varios parlamentarios dejaron el Congreso para asumir como ministros, algo que fue criticado en su momento porque debilitó al Legislativo. ¿No le parece que decisiones como la suya agravan eso y dejan al Congreso con menos figuras negociadoras en un eventual segundo gobierno de Piñera?
-No se puede ser arrogante y decir que uno es insustituible. Hay senadores que van a cumplir ese mismo rol. Yo me siento honrado, tuve el privilegio de haber trabajado por la ciudadanía, pero si yo continuaba de senador cerraba espacios a figuras emergentes del partido. Cuando nosotros partimos en la política -Andrés Allamand, Sebastián Piñera, Evelyn Matthei y yo-, de la llamada Patrulla Juvenil, se...
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