Conmoción causa homicidio de tres niños, su madre y un vecino en la comuna de Carahue
Entonces se acercaron para socorrerlo y devolverlo a la vivienda, pero ahí descubrieron con horror que los tres hijos de Rodríguez, la pareja de este y un amigo de la familia habían sido asesinados con golpes de hacha y un elemento punzante.
El obrero no pudo explicar nada de lo acontecido, pues no ha recuperado la conciencia y permanece internado, en calidad de detenido, en el Hospital Regional de Temuco, afectado por un coma medicamentoso y no etílico, según precisó el fiscal regional (s) de La Araucanía, Alberto Chifelle. Sin embargo, quienes llegaron en un primer momento a prestarle auxilio reconocieron en su cuerpo y ropas manchas de sangre y tierra, las que atribuyeron de manera inicial a la caída del sujeto en la calle.
Por eso, el trabajo en el sitio del suceso de los detectives de la Brigada de Homicidios y de los peritos del Laboratorio de Criminalística de Policía de Investigaciones resultará determinante para establecer la participación del obrero, quien aparece como principal y único sospechoso.
El impactante hecho fue descubierto cerca del mediodía de ayer, cuando vecinos llamaron desolados a Carabineros para dar cuenta del hallazgo al interior de la vivienda, que el trabajador, junto a su pareja e hijos, habitaba desde hace tres años.
En el living, sentado en un sillón y ensangrentado, estaba sin vida Julio César Huitramán Huentecoy (29), quien fue identificado como un vecino del grupo familiar y que hace solo diez días había salido de la cárcel luego de cumplir una condena por el delito de robo con intimidación.
En el dormitorio principal, sobre la cama de dos plazas, estaban los cuerpos de Norma Bañares Vásquez (26), pareja del detenido desde hace 12 años, y los hijos de ambos: Dilan (2), Aymer (4) y Emerson (12), los dos últimos alumnos de la escuela Amanecer, de Carahue.
Todos ellos, detalló el fiscal Chifelle, presentaban múltiples lesiones provocadas por un hacha y un cuchillo, especies que fueron incautadas junto a una carta en la que el obrero habría explicado que cometió los crímenes por una supuesta infidelidad de su mujer.
Indefensos
De acuerdo a la evidencia recogida en el lugar, ninguna de las víctimas presentaría signos de defensa, por lo que se presume que sus muertes ocurrieron durante la madrugada, cuando todas ellas estaban dormidas.
Lo que resta por dilucidar es si Juan Rodríguez habría estado al interior compartiendo junto a su amigo, mientras el grupo familiar dormía, o bien si este habría llegado a la...
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