La historia de la voz que llegó más allá del horizonte - 7 de Diciembre de 2014 - El Mercurio - Noticias - VLEX 547758746

La historia de la voz que llegó más allá del horizonte

Ocurrió el año 2000, un día 26 de noviembre. Tal como ayer, el Estadio Nacional estaba repleto de hinchas de la U que festejaron el bicampeonato logrado por el equipo que dirigía César Vaccia. Ese día, los azules empataron 1-1 contra Santiago Wanderers.

Después del partido, en los parlantes del estadio se escucha el cehacheí con que se inicia el himno de la U. Todos los fanáticos lo entonaron con el orgullo que solo sienten los campeones.

En la tribuna Andes estaba Jaime Aranda, un ex cantante lírico, quien al ver semejante espectáculo, a duras penas contuvo las lágrimas.

El Romántico Viajero

Aranda trabajó en 1958 en la Radio Minería y tres años más tarde en Cooperativa Vitalicia. Luego comienza la historia que lo inmortalizó en Universidad de Chile: "Don Vicente Bianchi, quien ya era un famoso director de orquesta, fue a buscarme. No podía creer que me ofreciera grabar un disco con los himnos de la U y de la UC".

"El inicio de la canción es con un agudo cehacheí. Lo hicimos con los músicos de la orquesta. Suena muy fome. Le dije a don Vicente que grabáramos uno en el estadio, pero no quiso".

El artista dice que estaría de acuerdo con que lo cambien por uno con el público actual, "pero con una condición, que sea a la antigua, no como ahora que no tienen pausas: 'chichichilelele, Universidad de Chile... Y dale, y dale...'. No señor, así no. Debe ser pausado: "Cehacheí, chí... Ele-e, le. Chi, chi, chi, le, le, le...Universidad de Chile".

La letra del himno pertenece a Julio Cordeo y lo identifica plenamente: "Hay una parte muy rupturista para la época, hecha para la juventud: 'Y en desnudo de mujer, contemplar la realidad'. Esa es poesía en su estado más puro, es maravillosa".

Sigue repasando la letra: "Brindemos camaradas, por la Universidad, en ánforas azules... En ánforas. Esa palabra muy pocos la conocían y se trata de un jarrón". Las ganas de cantar lo superan y de improviso, mientras relata la letra, empieza a entonarla en medio de la entrevista.

"Brindemos camaradas por las universidad, en ánforas azules, de cálida emoción. Brindemos por la vida, fecunda de ideal, sonriendo con el alma, prendida en el amor... La, la, la'. ¿Se da cuenta? Todavía canto".

El himno azul marcó de por vida a Aranda. Es uno de sus grandes orgullos y cada vez...

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