La foto y la película - 10 de Septiembre de 2022 - El Mercurio - Noticias - VLEX 910221266

La foto y la película

Chile es un país lleno de carencias, qué duda cabe de eso. Cuando el mundo desarrollado ya ha superado la pobreza, en nuestro país todavía cerca de uno de cada 10 chilenos vive en ella. La educación que reciben nuestros niños es de mala calidad. Los rankings mundiales de educación (prueba PISA) nos ubican en el lugar 43 de los 79 países observados. La participación laboral de la mujer es baja; la falta de oportunidades, la discriminación salarial y derechamente el machismo podrían ser parte de las causas de esta realidad. La desigualdad de ingresos en Chile es muy alta, especialmente entre el 10% de mayores ingresos y el 10% de menores ingresos; si eso se debe a privilegios de los primeros y falta de oportunidades de los segundos, no podemos mirar para el lado y dejar que las cosas continúen como están.Tenemos altos grados de informalidad laboral y empresarial. Como consecuencia de esto, la protección social y la seguridad laboral de amplios sectores de la población es precaria y las políticas públicas se tornan ineficientes. El Estado hace mal su pega. Hay cientos de programas sociales donde se desperdician recursos valiosos que podrían utilizarse para mejorar la educación, las pensiones y la salud de miles de chilenos. Somos un país burocrático. Nos cuesta decir que no y también nos cuesta decir que sí. Un No rápido y un Sí definitivo son imprescindibles para desarrollar proyectos y crear riqueza. La burocracia hace que nuestra riqueza esté quedando enterrada en el suelo, las oportunidades se estén moviendo a otros países y nuestros talentos se estén desplegando fuera de nuestras fronteras. Nuestra sociedad y nuestras instituciones castigan mucho el error y premian poco el éxito. Como consecuencia de esto, nuestras empresas son conservadoras, innovan poco y terminan haciendo más de lo mismo. Somos mejores culpando a otros que solucionando nuestros problemas. Les echamos la culpa de la desigualdad a los ricos, de la pobreza a los colonos españoles y de los fracasos deportivos a la mala suerte (jugamos como nunca y perdimos como siempre).En síntesis, nuestra foto no es buena. Hay mucho por hacer y un largo camino que recorrer para alcanzar los niveles de bienestar y calidad de vida de los países desarrollados.Analicemos ahora nuestra película. Me voy a remontar a los años 80, esos de rock argentino, Coco Legrand y el Super 8. El Chile de esos tiempos era mucho peor que el de ahora en casi todos los ámbitos de la vida. Había 45% de pobreza...

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