El éxito de un curso online depende de la actitud del alumno
Ya lleva cuatro meses y la experiencia, reconoce, es positiva. "Te obliga a ordenar tus tiempos y fijarte horarios; igual ha sido un poco cansador volver a estudiar, pero vale la pena".
Ya sea por comodidad, por la posibilidad de organizar el tiempo de estudio o por la facilidad de acceder a contenidos cuando se vive en lugares apartados, entre otras ventajas, el interés por realizar un curso online aumenta en el país.
Según datos del Sence, mientras en 2014 había 91 mil inscritos en esta modalidad de enseñanza, al año siguiente el número aumentó a 123 mil. Y la tendencia sigue en alza. Basta considerar el número de carreras o programas a distancia en los últimos cinco años: de 87 en 2012 se pasó a 361 en 2016.
"La educación online surge en un contexto donde cada vez es más difícil tener actividades presenciales. Esto ha permitido llegar a muchas más personas, que a lo mejor están imposibilitadas por la distancia o el tiempo de asistir a un curso presencial", precisa Felipe Vergara, coordinador académico de la Escuela de Psicología de la U. del Pacífico.
Prejuicios
Pero el éxito de la educación en línea depende en gran medida del perfil del alumno: no todas las personas pueden sacarle el mismo provecho.
"En general, los programas de formación online requieren ciertas características personales, como autonomía y persistencia, ya que gran parte de la responsabilidad del trabajo se lo lleva el alumno", dice Paulo Volante, académico de la Facultad de Educación de la U. Católica.
Precisamente, a quienes son capaces de establecer sus propios horarios y reglas, les irá mejor.
"La educación online es más indicada para personas que tienen un estilo de aprendizaje más autodidacta, en el sentido de que son capaces de ponerse ciertos horarios y cumplirlos, de investigar y estudiar por su cuenta. Entre las habilidades necesarias para tener éxito en este tipo de cursos se cuenta la disciplina, capacidad de planificación y focalización, por ejemplo", cuenta Vergara.
A partir de la experiencia que han tenido con este tipo de cursos, Volante considera que un factor esencial es la persistencia del alumno. "Hemos visto que personas muy sensibles a las fallas y a cometer errores, tienden a desistir de continuar estos programas. Es importante dejar a un lado la ansiedad de querer aprender todo a la primera".
Eliminar prejuicios es clave, agrega Geraldine Jara, directora del Departamento de Pedagogía de la Facultad de Ciencias de la Educación de la U. San...
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