¿Qué esconden las capuchas de quienes apalearon al Cristo de la Gratitud Nacional?
Lo dice una de las madres. Para ella, una es la forma en que fueron detenidos sus hijos. Recuerda que les hicieron un seguimiento desde el 9 de junio. Y al suyo, Sebastián, lo fueron a buscar a la casa el viernes 5. "Estamos choqueados", advierte esta funcionaria del Hospital Salvador con grado 27, viuda desde hace 12 años, que integra un grupo de cuatro apoderados que se cobijaron bajo el alero de un abogado de la "defensoría popular", quien los está persuadiendo de demandar al Estado por la forma de la detención.
Otra cosa es el fondo de lo que ocurrió.
-¿Le había contado su hijo o se enteró cuando lo fueron a buscar?
-No, no me había contado. Pero después nosotros hablamos todo eso.
Y ella quiere creerle que solo andaba en la protesta para que se mejore la educación.
Aunque las cámaras de las calles digan lo contrario.
Como doña Irma, la mayoría de los progenitores no se habían enterado.
Los padres de Felipe no tuvieron idea que el 9 de junio su hijo menor participó en una marcha que terminó en un impactante ultraje.
Lo supieron el domingo 7 de agosto, en el aeropuerto, cuando llegaban de sus vacaciones de invierno en Punta Cana con el hoy formalizado. Y no es que el muchacho confesara, sino que la policía llegó a capturarlo.
Así pasó con otros. Pero ellos no andaban de vacaciones en el extranjero, sino que en la calle o sobre un skate .
Son los formalizados por el saqueo a la Iglesia Gratitud Nacional y por ultraje a un objeto de culto. Son ocho los que estuvieron en el lugar y a la hora de la mutilación de la imagen de Cristo en la esquina de Alameda con Cumming.
¿Qué ocultaban sus capuchas? Nada bueno en varios de ellos, según los informes que manejan quienes participan en la investigación policial.
El desprecio a "una figura de yeso"
El único de los ocho chicos que habló durante la audiencia de control de detención y formalización en el Séptimo Juzgado de Garantía de Santiago, el sábado 6 de este mes, fue Bairon: "Tomé el Cristo y lo saqué sin motivación. Actué por impulso, no pensé que a alguien le podría molestar porque es solo una figura de yeso", dijo. "Lo saqué por euforia, como un animal de horda". Y luego comenzó a hablar en una lengua que motivó al juez a pedirle que explicara qué quería decir, como, por ejemplo, cuando señaló que actuó "entre espejos".
Estudia en el INBA, donde integra el Consejo de Delegados de Curso. El vicepresidente del Centro de Estudiantes, Javier Pavez, cuenta que Bairon "es muy activo en el...
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