Erosión institucional y populismo - 27 de Junio de 2020 - El Mercurio - Noticias - VLEX 845612417

Erosión institucional y populismo

En línea con lo proyectado por el Banco Central y el Fondo Monetario Internacional, el último Informe de Finanzas Públicas (IFP) de la Dirección de Presupuestos (Dipres) augura un desalentador escenario producto del coronavirus y las medidas para frenar su propagación: según el estudio, este año el PIB caería 6,5% y la demanda interna, un 9,8%. En el ámbito fiscal, los ingresos efectivos del gobierno central disminuirán 16,1% respecto de 2019, mientras que el gasto público, el déficit fiscal y la deuda pública alcanzarían el 28,7%, 9,6% y 34,8% del PIB, respectivamente. En el mediano plazo, tras una paulatina recuperación y en números que sugieren un alto grado de incertidumbre, la economía crecería en torno al 3,5% en 2024, mientras que la demanda interna lo haría en 3,7%. A partir de 2021, se prevé que la recaudación aumente sostenidamente a una tasa del 2,8%.Pese a que tales cifras indican que el próximo año debiera iniciarse una senda de recuperación, las nuevas estimaciones son menos optimistas que las presentadas en la actualización del primer trimestre. Por ejemplo, la reciente proyección del PIB está 4,5 puntos porcentuales por debajo de su estimación anterior (-2%), la caída en los ingresos efectivos es mayor en 4,3 puntos (11,8%), el déficit fiscal está por encima en 1,7 puntos (7,9%) y la deuda bruta en 2,1 puntos (32,7%).Prolongada falta de rigurosidadSi bien la pandemia ha jugado un rol crucial en el declive de las arcas públicas, el deterioro de estas se remonta a años atrás. En 2009 el déficit fiscal se ubicó en 4,5% del PIB, en 2015 alcanzó el 2,2% del PIB y en el último año registró el 2,8%. A pesar de esfuerzos puntuales, las cifras indican un prolongado proceso de descalce de ingresos y gastos. Esta persistencia del déficit, que no fue acompañada por un mayor crecimiento, trajo consigo un brusco incremento de la deuda -en 2019 ella rondaba el 5,8% del PIB, para posteriormente triplicarse y llegar al 17,3% en 2015, y cerrar en 27,9% en 2019-. La expansión del aparato estatal que acompañó dicho proceso estuvo marcada por la carencia de impulsos modernizadores. Con el inmenso esfuerzo fiscal observado desde octubre, el tamaño del Estado de Chile alcanzará un 28,7% del PIB, mientras se espera que la deuda se eleve sobre el 35% del PIB este año. Ante este escenario, la revisión a la baja de la clasificación de nuestra deuda soberana parece casi inevitable.Para el mediano plazo, la tendencia será similar, pues, según la Dipres...

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