La cruzada de las diputadas
-Acostúmbrate, porque ahora te van a quitar la silla -le dijo, bromeando, un diputado a otro.
Pero fue una sesión tensa, en la que las mujeres sacaron la voz para defender su mirada sobre el sistema de cuoteo, visibilizando un fenómeno nuevo en el Congreso. Por primera vez, las parlamentarias están unidas frente a una causa común, más allá de sus diferencias políticas.
Fue Marcela Sabat (RN, diputada por Ñuñoa y Providencia) la primera en darle forma a esta dinámica transversal, cuando convocó hace un mes a una "bancada de mujeres" que apuntara a promover una agenda de género. No era el primer intento de crear un grupo de este tipo, pero esta vez diputadas de todos los partidos respondieron a la invitación: en las últimas semanas se han juntado, de manera informal, en dos ocasiones, crearon el chat "Bancada Mujeres" por WhatsApp y esperan poder constituirse a corto plazo en una bancada oficial, con secretario y sesiones fijas a las que quieren sumar por lo menos a un hombre de cada partido.
A partir de esta semana, harán nuevas reuniones. ¿El objetivo? Retomar temas que las diputadas de los períodos anteriores no alcanzaron a posicionar y, lo más importante, establecer nuevos lineamientos. Ya se han mencionado proyectos como la creación del Ministerio de la Mujer y Equidad de Género o la Ley de Parto Anónimo, entre otros. Pero las diputadas esperan que los debates que se vayan dando de aquí al 2018, también marquen la pauta:
-La idea de la bancada es visibilizar ciertos temas relacionados con la mujer y concientizar a los hombres. Por eso queremos comprometer con la bancada a diputados también, para que entiendan cuáles son los problemas que afectan a la mitad de la ciudadanía que no han sido tocados por la falta de mujeres en el Congreso -explica Marcela Sabat.
-Este año aumentamos un poco, un poquito, la representación de mujeres y somos varias las jóvenes; entonces, hay como una energía nueva y mucha convicción de avanzar en dirección a la equidad de género -dice Karol Cariola, diputada del Partido Comunista por el distrito 19 (Independencia, Recoleta).
Agrega:
-Esto es algo transversal. Tenemos muchas diferencias en otros temas, pero por lo menos en relación a que la mujer ocupe un rol más protagónico, el rol que le corresponde en la sociedad, tenemos una meta que nos unifica.
La repartición del poder
Chile sigue registrando cifras de representación femenina particularmente bajas en el Parlamento. Las legisladoras solo constituyen un 15,8% del Congreso, una cifra muy por debajo de las estadísticas internacionales. Un informe del pasado mes de junio de la Biblioteca del Congreso indica que la participación de mujeres en el Parlamento a nivel mundial alcanza un 21,9% en ambas cámaras y un 22,3% en la baja. A nivel regional (Latinoamérica y el Caribe), la cifra para la Cámara de Diputados sube a un 24,5%.
En ese contexto, el machismo y la discriminación son cosas a las que la mayoría de las diputadas se han enfrentado. Marcela Sabat, quien está en su segundo período parlamentario, explica:
-No quiero victimizarme, porque yo elegí estar aquí con todo lo bueno y lo malo. Pero cuando entras al Congreso, te das cuenta de la desventaja que existe. Corres más lento, porque hay barreras. Este no es un tema de hombres y de mujeres, es un tema de poder. Ellos se reparten el poder entre ellos y las mujeres no estamos en política, porque no es un mundo que esté hecho para nosotras -dice.
Paulina Núñez, diputada RN por el distrito 4 de la Región de Antofagasta, reconoce haber sido nombrada seremi de la Segegob...
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