Conclusiones
| Autor | Rodrigo Ubilla M., Daniel Rebolledo D., María Jesús Rosende E. |
| Cargo | Sociólogo de la Universidad de Chile y Magíster en Ciencias Políticas en la Universidad de Austin Texas. Es Director del Área Política y Sociedad Civil de Libertad y Desarrollo desde mayo de 2020. / Sociólogo de la Pontificia Universidad Católica de Chile. Tiene un M.A. en Comunicación Política de la Universidad Johns Hopkins. Es investigador... |
| Páginas | 27-28 |
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DICIEMBRE 2022 / SERIE INFORME SOCIEDAD Y POLÍTICA 184
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La oleada de migrantes que ha ingresado a Chile en los
últimos años sin lugar a dudas dejará su marca en nues-
tra historia, lo anterior principalmente por tres razones.
La primera de ellas es su magnitud: haber duplicado
la población migrante pasando de ser un país con una
proporción por debajo de la del mundo y Latinoamé-
rica a estar por encima de ambos, aproximándonos a
un escenario donde pronto en Chile uno de cada diez
residentes será de origen extranjero, marcará un antes y
después. En segundo lugar, se encuentra la concentra-
ción de este fenómeno, ya sea entendido en términos
temporales, recordando que el aumento poblacional
descrito anteriormente sucedió en un plazo no mayor
a diez años, y territoriales, en tanto la mitad de la po-
blación extranjera se concentra en 15 comunas del país,
lo que incidirá en sus procesos de desarrollo económi-
co y social. En tercer lugar, se encuentran los cambios
cualitativos de la población migrante, entendiendo que
el perl y la posición que este segmento ocupaba en la
sociedad chilena han variado signicativamente en los
últimos años.
Respecto a este último punto, para entenderlo a cabali-
dad vale la pena destacar algunas de las variables en don-
de este cambio se ha reejado de manera más clara: i)
prácticamente uno de cada dos inmigrantes que ingre-
saron a Chile entre 2018 y 2021 proviene de Venezuela;
ii) cerca de un 50% de los inmigrantes se encuentra entre
los 25 y 39 años de edad, es decir, corresponden a pobla-
ción en edad de trabajar; iii) la tasa de pobreza entre los
inmigrantes es superior a la de no inmigrantes, una rela-
ción que se invirtió en la última década; iv) solo un 14%
de los inmigrantes es propietario de su vivienda, la canti-
dad de hogares migrantes que comparten una condición
de precariedad habitacional ha aumentado y un 40% de
los jefes de hogar de campamentos son migrantes. En
denitiva, esta nueva ola, además de tener características
7. CONCLUSIONES
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