La clase magistral del mejor profesor de Chile - 28 de Noviembre de 2020 - El Mercurio - Noticias - VLEX 852381184

La clase magistral del mejor profesor de Chile

-Creo que estamos en un contexto muy especial, siendo profe de Historia no me cuesta verlo. Es una época de muchos cambios y la educación tiene que jugar un rol crucial, ser un espacio de transformación. Tenemos que empoderarnos como docentes. Los estudiantes nos vienen dando cátedra de empoderamiento. Es hora de que lo empecemos a hacer, creer en nuestras prácticas, en nuestras habilidades, saber que tenemos una experiencia distinta a la gente que lo ve desde otros lugares, sin desmerecerlos, pero nosotros tenemos un valor agregado por estar metidos en la sala de clases día a día.Quien habla es Manuel Calcagni, profesor de Historia y Geografía del Instituto Nacional, 33 años. Hace pocos minutos, parado en un pequeño escenario del estudio 5 de TVN, su nombre fue anunciado como el ganador de la versión 2020 del Global Teacher Prize Chile, lo que lo convierte en el actual mejor profesor del país.Calcagni fue presentado como candidato a este premio por la Cineteca, que destacó la metodología que usa en sus clases, basada en una novedosa forma de investigar y entender la historia a través de talleres de cine.-Siento que desde ahí me he ido haciendo un espacio, intentando aportar a las discusiones, generando más diálogo, que es algo que con la violencia se pierde muy fácil. Creo que con esto se ha cumplido un rol muy bonito de abrir un espacio de encuentro dentro del liceo -dice.Manuel Calcagni estudió en los Sagrados Corazones de Manquehue. Recuerda que no era común que alguien quisiera estudiar Historia en su colegio, "y menos en la Universidad de Chile". Por eso, cuenta, muchos de sus profesores y compañeros le insistieron para que desistiera. También su familia. Pero sentía que necesitaba salir de la burbuja en la que, sospechaba, vivía.-Intuitivamente sabía que para mis propósitos y convicciones, me iba a nutrir más en la Chile que en otra universidad. No necesitaba algo tan ordenado y académico, necesitaba nutrirme de experiencias también.-¿Y cómo fue esa experiencia?-La verdad es que siempre fue un tema el hecho de que yo viniera del Manquehue. No fue terrible, pero siempre estaba la talla, el chiste del cuico que no entiende o que no sabe solo por ser cuico. Pero nunca pasó a mayores. Y, bueno, me pasaba también al otro lado. En el colegio Manquehue tampoco me sentía muy identificado en muchas cosas y siempre fui blanco de las tallas, la del comunista, del chascón, etc.En su elección, dice, también pesó su abuelo paterno, quien había sido profesor de Historia del INBA y luego del San Juan Evangelista.-Es increíble lo que me pasa con eso. Por ejemplo, una de las juradas del premio trabajó con mi abuelo. Fue emocionante porque en distintos momentos clave, cruciales de mi vida, él ha aparecido. Y también en momentos difíciles.En 2008, la familia de Calcagni se fue a vivir a Estados Unidos. Él estaba en tercer año de universidad y congeló la carrera para acompañarlos. Fue el momento en que se encontró con el cine.-Estábamos en la frontera entre México y Estados Unidos. Yo no hablaba inglés, no conocía a nadie, así es que me dediqué a cocinarle a mi familia y a estar con ellos. Ni siquiera tenía visa, no podía viajar mucho, no podía trabajar, ni tener mis gastos, entonces estaba todo el día en la casa y me puse a ver películas, tres al día era el promedio.En esa época compraba DVDs, con filmes que no se encontraban en Chile. Para él, poder verlos era como estar frente a una joya.-Ahí me hice más...

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