Cisnes salvajes: China, desde la rigidez imperial a las perversiones comunistas
| Autor | Vanessa Kaiser |
| Cargo | Directora de la C?tedra Hannah Arendt en la Universidad Aut?noma de Chile |
| Páginas | 22-23 |
22 Libertad y Desarrollo / lyd.org
LECTURA RECOMENDADA
isnes Salvajes
es un relato bio-
gráco inscrito en la historia
de China del siglo XX. Esta
obra despierta interés no sólo
por el profundo conocimien-
to que su autora, Jung Chang, tiene de
lo acontecido tanto bajo la dictadura del
Kuomintang, como en el totalitarismo de
Mao. Su relato nos ofrece, además, la posi-
bilidad de sumergirnos en la realidad de la
vida desgarrada por el totalitarismo en la
voz de una mujer cuyas reexiones no se
encuentran inuidas por una concepción
previa de lo femenino. De ahí que su mira-
da sobre sí misma, su madre y abuela, enri-
quezca nuestra perspectiva sobre la histo-
ria sin desmerecer ninguno de sus matices
ni agotar las posibilidades de comprensión.
La historia comienza en los primeros años
del siglo XX cuando el orden sociopolítico
chino era el del Imperio Quing que gober-
nó entre 1644 y 1912. Fue en 1907 cuando
nace Yu- Fang, abuela de la autora que, a
partir de una minuciosa descripción de las
costumbres de la época, nos muestra el rol
al que estaba destinada la mujer. En ese
tiempo, como sucede hasta hoy en la ma-
yor parte de las sociedades arcaicas caren-
tes de desarrollo económico, los matrimo-
nios “era una transacción y no una cuestión
de sentimientos”. Y es que, al no haber un
mercado que ofreciera posibilidades labo-
rales, las mujeres sobrevivían en tanto tu-
viesen un esposo que las mantuviera. El
encuentro entre Xue Zhi-heng, poderoso
general del Kuomintang (Partido Nacio-
nalista) y su futura esposa, Yu- Fang, nos
revela la rigidez de las costumbres: “Cuan-
do concluyó su oración, mi abuela realizó
tres kowtow más frente al Buda. Al ponerse
de pie, perdió ligeramente el equilibrio, lo
que no era difícil con los pies vendados, y
extendió la mano para apoyarse en su don-
cella. El general Xue y su padre acababan
de iniciar su avance. Mi abuela se rubori-
zó e inclinó la cabeza. A continuación, dio
media vuelta y se dispuso a partir, lo que
constituía la actitud adecuada. Su padre
avanzó un paso y la presentó al general.
Ella realizó una pequeña reverencia sin al-
zar el rostro en ningún momento”.
La descripción de la escena deja en evi-
dencia la actitud de sumisión de Yu- Fang,
quien a los dos años de edad había comen-
zado con el proceso de destrucción de sus
pies, por lo que caminaba tambaleándose.
En esos años de tierna infancia su madre,
quien también llevaba los pies vendados, le
ató una cinta de seis metros de longitud
doblándole los dedos bajo la planta y po-
niendo una roca sobre el arco de sus pies
para aplanarlos. ¿Por qué era necesario so-
meter a las mujeres a este tormento? Por-
que “se consideraba erótica la imagen de
las mujeres cojeando”.
La vida de Yu- Fang tuvo vuelcos radica-
les. No sólo debido a su embarazo de Bao
Quing, madre de la autora de
Cisnes Salva-
jes
, sino, además, porque a sus escasos 24
años de edad había vivido la experiencia de
ser concubina y compartir con otras espo-
sas del general un espacio común donde
las rencillas, envidias y celos, eran la tónica
de un despotismo femenino cruel y despia-
dado. Producto de la guerra con los comu-
nistas, enviuda, y vuelve a ser dueña de su
CISNES SALVAJES:
CHINA, DESDE LA RIGIDEZ
IMPERIAL A LAS PERVERSIONES
COMUNISTAS
Vanessa Kaiser
Directora de la Cátedra Hannah Arendt en la
Universidad Autónoma de Chile
C
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