En Alto Hospicio, los profesores se convierten en tutores de sus alumnos - 4 de Mayo de 2015 - El Mercurio - Noticias - VLEX 568499518

En Alto Hospicio, los profesores se convierten en tutores de sus alumnos

La iniciativa, que busca mejorar los índices de abandono escolar en este colegio particular subvencionado que atiende a 86% de alumnos vulnerables, es parte de la Red de Escuelas Líderes de Educación en Pobreza, iniciativa de la Fundación Chile, Fundación Educacional Arauco, Minera Escondida y "El Mercurio".

El programa, que fue implementado en 2012 en uno de los establecimientos pioneros de la novel comuna nortina, es reconocido por profesores y directivos como un éxito. Actualmente hay 170 estudiantes, de los 1.600 que tiene el colegio, que participan en la iniciativa.

"Me ayudó a subir mis notas y a tener mejor conducta. Mi profesora tutora me pregunta todos los días cómo estoy, me llama para mi cumpleaños e incluso cuando estoy de vacaciones; siempre está pendiente", dice Inés Sánchez, alumna de sexto básico, quien el año pasado ingresó al programa "Mejor encender una luz que renegar por la oscuridad", que busca que los profesores y funcionarios se involucren más a fondo en la educación de los estudiantes.

Según la orientadora del establecimiento y una de las gestoras de la iniciativa, Miriam Orellana, esta responde a un constante abandono escolar de los niños -que no cuentan con el apoyo necesario de sus apoderados- debido, principalmente, a problemas de disciplina. La mayoría de estos alumnos proviene de hogares disfuncionales, "muchas veces son madres solteras o a los niños los cría un familiar; incluso, hay casos en que los padres están en la cárcel. Todo esto provoca que los niños tengan déficit de cariño y actúen violentamente porque es lo único que conocen".

Pablo Mella, de 12 años y en séptimo básico, tenía serios problemas de conducta, y según su profesora tutora, Isabel Bruna, ha logrado un gran cambio. "Esto no es de un día para otro, pero los colegas me dicen que su conducta mejora. En mi clase ahora es muy colaborador y muestra un especial interés por las matemáticas", comenta mientras a paso rápido se apura a una clase de esa misma asignatura.

En el programa participan 160 padrinos y algunos tienen más de un niño a cargo, "se encariñan y a veces no los quieren dejar por temor a que tengan un retroceso", confiesa Miriam Orellana. También reconoce que deben esforzarse para entregar a los alumnos las herramientas que les permitan surgir solos.

"Quizás una debilidad que tenemos por el momento y que debemos superar es el hecho de que los apoderados se involucran poco. Algunos sí lo hacen, incluso se hacen amigos de los...

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