Acuerdo sobre narcotráfico entre gobierno y las FARC desata polémica en Colombia
El acuerdo sobre narcotráfico al que llegaron el viernes las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno de Juan Manuel Santos desató polémica en el país, que en siete días celebrará elecciones presidenciales.
Según anunciaron los delegados del gobierno en La Habana, donde se llevan a cabo las negociaciones desde noviembre de 2012, las FARC se habrían comprometido "a contribuir a la solución definitiva del problema de las drogas ilícitas y a terminar con cualquier relación con el narcotráfico", aunque eso ocurriría una vez que se firme la paz. No se especificó qué pasará con el negocio de la droga ilícita en el intertanto. La resolución, considerada como "histórica" por el gobierno, contiene tres subpuntos, sobre los programas de sustitución de cultivos, de salud pública, y sobre posibles soluciones para el problema del cultivo y el tráfico de drogas.
Este es el tercer acuerdo de los diálogos de paz, tras haber cerrado las conversaciones sobre la propiedad de la tierra -origen del conflicto armado- y el de la participación política de los guerrilleros, después de un eventual fin del conflicto.
El compromiso del viernes fue saludado por el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, y otros gobiernos en la región, como el peruano y el mexicano. El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, lo destacó como un "paso mayor hacia la paz".
Sin embargo, en Colombia se cuestionó que el acuerdo llegue apenas a una semana de las elecciones, en las que el Presidente Santos busca un segundo mandato.
Cuestionamientos
La oposición planteó que esos compromisos no son necesariamente un verdadero avance hacia el fin del conflicto, sino que forman parte de una estrategia política del Mandatario, quien ha venido cayendo en las encuestas de intención de voto.
Los sondeos coinciden en que Santos se verá obligado a pelear la Presidencia en un balotaje con Óscar Iván Zuluaga, quien representa al partido del ex Presidente Álvaro Uribe, el mayor crítico de la gestión de Santos.
El gran problema para el Mandatario no es solo ir a segunda vuelta, sino que su intención de voto se estancó (los analistas le dan un máximo de 30% en primera ronda), mientras que Zuluaga ha venido en un constante ascenso. De ahí, comenta el diario El Mundo, la importancia de un gesto de la guerrilla para impulsar su campaña.
El tema de la paz se ha convertido inevitablemente, en los últimos 30 años, en el tema crucial para todos y cada uno de los aspirantes a la...
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