'Las actrices postergamos la maternidad por pega'
Esta figura recurrente de las teleseries, con 13 producciones desde 2006, acusó el golpe:
-Yo no quería volver de mi viaje, entonces llegar y que cayera esta bomba atómica -insiste-, fue atroz. Cuando estás acostumbrada a tener contratos que se renuevan altiro, (pensar en hacer otra cosa) es como tirarse a la piscina. Pero yo dije: "Ahora voy a empezar a analizar más los roles que quiero". Hoy no tengo canal, pero tampoco tengo ansiedad. Quiero buscar proyectos que me interesen, no contratos. Quiero tener calma para elegir.
Mientras ensaya para el estreno teatral de "Perplejo", bajo la dirección de Luis Ureta, por estos días está en pantalla como Miranda, una inescrupulosa representante de futbolistas en la pospuesta "Príncipes de barrio". En 2014 había sido la vecina que trataba de quitarle el marido a la protagonista de "Mamá mechona". En su currículum, las antagonistas son su especialidad.
-Se cansó de tener roles de villana.
-Creo que lo que me agota es el poco poder de decisión que uno tiene respecto a los discursos que representan tus personajes. Yo no encuentro que ser adulto sea terrible y, de repente, las teleseries muestran el mundo adulto como terrible. Además, los roles femeninos no son muy interesantes y yo me siento cada día más una mujer empoderada, que tiene amigas fantásticas, todas muy dueñas de sus propias decisiones. En las teleseries nocturnas, las mujeres quedan como súper histéricas. Si son exitosas respecto del trabajo no logran desarrollar bien lo familiar, no son buenas mamás o sexualmente no están bien. Entiendo que se necesiten conflictos para desarrollar historias y personajes, pero de repente eso agota. Quiero desarrollar otras teclas actorales, poder tocar la voz más dulce, usar otros recursos de mi abanico.
Esta tarde de 35 grados de temperatura, Begoña Basauri luce un maxivestido estampado con mariposas. Un diseño que se repite en el estuche rojo, donde guarda los scriptos de colores con los que repasa el texto teatral que tiene sobre la mesa de un café en Vitacura. Dice estar consciente de que la industria es pequeña y que la selección de actores busca "resultados inmediatos". Por eso, admite, cree que su perfil físico ayuda a que la encasillen en ciertos roles.
-Tiene que ver con que desde chica tengo cara de gato, los ojos más picarones o misteriosos. Mi voz es más ronca y en Chile en general las mujeres tienen una voz más aguda. Es algo que de alguna forma te enseñan sin enseñártelo, eso de no hablar fuerte. Pero yo nunca tuve esa educación. Siempre fui muy ronca y nunca me dijeron "Begoña, no grites". Estudié en...
Para continuar leyendo
Solicita tu prueba