Cuánto le cambió la cara a Uruguay con Mujica - 26 de Octubre de 2014 - El Mercurio - Noticias - VLEX 540607246

Cuánto le cambió la cara a Uruguay con Mujica

Antes que Mujica fuera elegido Presidente en 2009, el mundo asociaba a esta pequeña nación sudamericana con el buen fútbol y los cortes de carne, esto último era algo lógico si se considera que el número de cabezas de ganado cuadriplica a los más de tres millones de habitantes.

Ahora, Uruguay llama la atención por tener una de las leyes más radicales de América Latina respecto de la despenalización del aborto (hasta el tercer mes de embarazo); por ser el segundo país de la región, después de Argentina, en legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo; por su fuerte apuesta por las energías renovables como la eólica y la biomasa, y por la aprobación de la ley de regulación y control del mercado de la marihuana.

En estos cinco años de gobierno, el país se ha convertido "en la sede de un experimento social liberal", afirma The Wall Street Journal.

Lo que no menciona el prestigioso diario es que los cambios se adelantaron en un país con tradición en medidas sociales polémicas. A principios del siglo XX, una época donde Estado e Iglesia aún no estaban separados en muchas constituciones de América Latina, un gobierno anticatólico cambió en Uruguay los nombres de todos los feriados de origen religioso: el 6 de enero pasó a ser el Día de los Niños, la Semana Santa pasó a ser la Semana de Turismo, el 2 de noviembre pasó a ser el Día de los Difuntos, el 8 de diciembre pasó a ser el Día de las Playas y el 25 de diciembre pasó a ser el Día de la Familia. Hoy sigue siendo la nación más laica de Sudamérica, donde el 40,7% de los uruguayos asegura no tener una afiliación religiosa, según el Centro Pew.

Pero, sin duda, la iniciativa más controvertida de Mujica se refiere a la legalización de la producción y venta de marihuana, en el continente de la guerra contra las drogas. Países como Canadá miran con interés la medida, mientras Brasil ha expresado su preocupación y Naciones Unidas, su rechazo.

Al interior del mismo país, el 64% de la población está en contra, según una encuesta de la consultora Cifra. Además, los tres candidatos a la presidencia -el oficialista Tabaré Vázquez, el liberal Luis Lacalle y el conservador Pedro Bordaberry- han cuestionado la medida y rechazado que la droga se venda en farmacias. Como la ley aún no ha entrado en vigencia, incluso podría ser revertida, sobre todo cuando se prevé que el nuevo Congreso quedará más dividido de lo que lo tuvo Mujica.

La mayoría de las reformas alcanzadas con el Mandatario están lejos de...

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